Este jueves
ha tenido lugar en la biblioteca pública “Virgilio Gutiérrez” de nuestra localidad un Encuentro
con el escritor e historiador extremeño Justo Vila Izquierdo, en el que
lectores de la biblioteca pudieron compartir una tarde de tertulia más que
agradable en torno a su novela “Lunas de agosto”. Este encuentro se enmarca
dentro de la campaña de animación lectora “Un libro es un amigo” organizada por
la Diputación Provincial de Badajoz y la Fundación Germán Sánchez Ruipérez.
Publicada en
2006, “Lunas de agosto” es su tercera novela publicada por la editorial pacense “Libros del oeste”. La
larga y acreditada trayectoria como historiador de Justo ha marcado su obra y
su oficio de escritor, y en este libro sigue la línea temática de otras
novelas, la Guerra civil en Extremadura, que constituye el telón de fondo ya
habitual en su narrativa. Se trata por tanto de un relato histórico-ficticio
inspirado en hechos reales acaecidos en el Badajoz de 1936, concretamente en
uno de los episodios de la guerra civil más desafortunados y cruentos en
nuestra región: la matanza de la antigua plaza de toros de Badajoz, hoy en día
Palacio de congresos, producida en los días posteriores a la batalla de
Badajoz, y que fue el resultado de la represión ejercida por el ejército
sublevado contra civiles y militares defensores de la II República, cuando el
tercio de regulares marroquíes al mando del general Yagüe toman la ciudad, y
que se llevó a cabo entre los días 13 y 15 de agosto.
“A mi abuelo lo mataron en la plaza de toros
de Badajoz”, así comienza "Lunas de agosto". En primera persona lo narra el
nieto de uno de los personajes de la novela, Rafael Alcántara, un maestro de escuela
fusilado en dicha matanza. Las palabras del nieto de Rafael constituyen unos de
los ejes narrativos del libro, junto con los recuerdos de Marcelo Rojas, un
miliciano de izquierdas que sobrevivió a la masacre, y el diario del falangista
Benito Albarrán, conservado por su nieta. Todo esto con la base documental de
Mario Neves, periodista portugués de la época y uno de los primeros en grabar
con su cámara horas después de la toma de Badajoz a los miles de muertos. Se
trata por tanto de una novela coral conducida por varios narradores que se
alternan y van sucediéndose según van acaeciendo los hechos en el desarrollo de
la acción; personajes reales y ficticios se mezclan en este relato narrado
desde la doble perspectiva y visión de los dos bandos, vencedores y vencidos, víctimas
y verdugos. Con este título Justo cierra un ciclo de novelas de las que forman parte “La agonía del búho
chico y “La memoria del gallo” sobre la guerra civil, la postguerra y la
represión en Badajoz. El rigor histórico fruto de su labor como cronista y el valor
documental tras largos años de investigación se unen a una gran capacidad
narrativa para hacer de esta novela, mezcla de narración e historia, un relato
apasionante y, a juicio de todos los integrantes del encuentro, muy bien escrita,
con momentos brillantes y de gran intensidad y dureza, tal y "como si dibujara
un cuadro con palabras", recuperando la realidad, la memoria histórica y el
sentido de la justicia en pro de las miles de víctimas que murieron luchando por
sus ideales y por la libertad en este trágico acontecimiento de nuestra
historia.
Justo contó
que la motivación que le lleva a escribir sobre las víctimas de la represión
franquista es alzar la voz a favor de ellas, aludiendo al hecho de que la
historia sólo ha estado contada durante muchos años desde el punto de vista de
los vencedores, y más allá de la investigación, de los datos y la realidad
histórica, le inspiran la emoción de escribir llegando al alma de las personas
que sufrieron y siguen sufriendo con tantos años de silencio.
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